El limón, esa amarilla y ácida fruta que usamos para dar más sabor a algunas comidas o que nos sirve para preparamos limonadas para refrescarnos cuando hace mucho calor.
Lo que quizás no sabes es la cantidad de beneficios que puede aportar a tu cuerpo con un solo truco: empezar tu día con un vaso de agua tibia con limón.
Se trata de un consejo de los expertos de la Cleveland Clinic , que aseguran que los pequeños cambios pueden tener un enorme impacto sobre la salud. Es por esto que destacan siete motivos por los que beber agua con limón por la mañana mejorará tu salud.
Mejora la digestión
El ácido del limón ayuda a descomponer los alimentos. De hecho, es por esto que nuestro estómago está lleno de ácidos, los jugos gástricos, que a medida que envejecemos van disminuyendo. Esta fruta ayuda a nuestro estómago a mantener esos ácidos. Además, en caso de una indigestión o cuando se padece ardor estomacal el jugo de limón aliviará los síntomas. Su consumo también lo recomienda la American Cancer Society para estimular los movimientos intestinales.
Te mantiene hidratado
Según los expertos de la Cleveland Clinic, la mayor parte de nosotros no bebemos la cantidad de agua que debemos -según muchos estudios debería estar en torno a los dos litros diarios-. Beber un vaso de agua con limón por la mañana ayudará a tu cuerpo a hidratarse y recuperar los líquidos que haya podido perder durante la noche. ¿Cómo saber si se ha bebido lo suficiente? Cuando la orina tenga un color claro.
Ayuda a perder peso
Son muchos los rumores que corren por Internet asegurando que el agua con limón adelgaza. La realidad es que el simple hecho de beber agua con limón no hará que consigas tu peso ideal, pero si ayuda a perder peso. Esto se debe a que el limón es diurético, por lo que ayuda a limpiar nuestro cuerpo y evita la retención de líquidos.
Evita la oxidación
Los limones son una fuente de fitonutrientes, que son sustancias que ayudan a nuestro cuerpo a protegerse ante las enfermedades. Además, los fitonutrientes nos aportan propiedades antioxidantes que nos hacen envejecer mejor.
Una dosis de vitamina C
Un vaso de agua tibia y medio limón exprimido -solo 6 calorías para el cuerpo- harán que consumas la sexta parte de la cantidad diaria de vitamina C que necesita tu cuerpo para darnos energía, proteger el daño celular y ayuda a reparar las lesiones que pueda haber en nuestro cuerpo.
Otra dosis de potasio
Además de la vitamina C, el limón es una fuente de potasio. Un mineral sin el que nuestro cuerpo no podría funcionar: es necesario para la comunicación nerviosa muscular, transporta los nutrientes y desechos por el cuerpo, y -además- reduce los efectos de la sal sobre la presión sanguínea.
Previene los cálculos renales
El último motivo que da la Cleveland Clinic para incorporar a nuestra rutina la práctica de beber un vaso de agua tibia con limón es que previene las dolorosas piedras renales que pueden generarse en nuestros riñones por una deficiencia de citrato urinario.